lunes, 11 de abril de 2011

La ilusión de un futuro salvador

Ficción, es la misma devoción, es que ya no recuerdo la letra de esa canción que cantábamos los dos cuando tu alma al fin lloró, cuando el verdugo lo anunció, la muerte sonrió y el cielo se iluminó y mi sonrisa se desdibujó y los pájaros, sus alas, el aire, vacío, las luces que entran por mis ojos, el filo del metal que se acerca reluciente a mis últimos latidos, la desesperanza de que se presente alguna divinidad y la certeza de estar solo, el sueño del mas débil, las historias sin terminar, confluyen en un momento donde solo el final me haría despertar.

Y así fue, la verborragia no deja de aflorar, en una manera poco sutil de despertar, asustado, agitado y todavía, en parte, dentro del sueño que aun se siente tan real. En un desesperado intento de volver a la normalidad, vuelvo a pensar en la banalidad, elegir ropa para vestir, tirar abundante agua sobre mi cara, comer algo aun sin tener apetito, tomar mis cosas, ir a la calle... Un ambiente raro dominaba el paisaje, no recordaba la puerta de casa de esa manera, es como nunca haber estado realmente en el lugar donde se supone que uno vive y ahora, en este preciso momento, descubrirlo todo en un paneo y se sienten las manos del verdugo, sometiendo mis anhelos y cumpliendo las ordenes de quien todo lo ve, lo controla y lo sabe, quien tiene tanto poder que mantiene vivo a dios en la mente de sus súbditos para su propio bien. Hacia rato tenia el presentimiento de estar en el final, me despedía de cada cosa que hacia, cada persona, cada lugar, cada momento, tenia un extraña sensacion de "ultima vez" en todo lo que pasaba y aquí se cumple mi augurio cual sexto sentido, diría la plebe, me había adelantado.

Otra vez en la plaza, otra vez la multitud, el pedestal, las cadenas, la condena, otra vez el deseo de que sea una ficción, otra vez su cara, su recuerdo al cual me aferro para no perder la entereza y la cordura, para no arruinar mi imagen al final. Por mas que pienso, no recuerdo la canción, ni la melodía, solo su voz, su cara, sus ojos y ya no recuerdo mi casa, mis amigos, mis historias, mis padres, mi familia, no recuerdo porque estoy en esta situación, ni su cara, ni su pelo, ni sus ojos, ni su voz...

2 comentarios:

Chica yeye dijo...

es raro , yo me inmagine una situacion totalmente distinta , pero el relato permite esas diferencias ....
ya lo hablamos en privado toda una noche !!!!

extrañaba firmar por blog ....

deberia usarlo mas seguido!
beso77es mas mas mas

Violetcarsons dijo...

Tuve que escoger un mensaje que transmitiera lo que quería decir.
Que estoy aquí, que ha pasado mucho tiempo, pero que aunque resulte extraño pedir que pasen por mi blog después de todo...Es porque los comentarios, sobre todo los que se implican, me hacen sentirme comprendida.
Y sabía que el mensaje que elegí quedaba raro ante la gente que sí que se acordaba de mí, y que yo sabía que se acordarían...
Así que lo siento. Me acuerdo bien (a pesar de mi memoria de pez) de tus comentarios en mis entradas.
Además, mi memoria visual recuerda tu foto...

Pd: Dime algo.