miércoles, 28 de mayo de 2008

Siempre

Hace 10 minutos.
No tuve noción del tiempo hasta que mire el reloj. Diez minutos pasaron desde que tu luz se apago por hoy. Aveces, cuando te vas, me quedo pensando en lo que hablamos, lo que dije y lo que podría haber dicho, y recién ahí es cuando de verdad me formo una idea sobre las cosas que no te pude responder, sobre el tema ese en que me dejaste callado y sin respuesta.
Cuando digo algo y no lo puedo justificar me siento impotente, algo adentro mio me dice que tengo razón, que hay una lógica para lo que dije, pero no encuentro manera de expresarlo. Y aveces a los pocos minutos y otras después de días, así como si nada, como si de repente algo me golpeara la cabeza y pum todo se hace muy claro y tengo la respuesta. Pero ya no vale nada, ya no vamos a volver a llegar otra vez a ese punto de la conversación y aunque te lo diga igual, sin esperar a que se de el momento, ya no significa lo mismo, el tiempo así borra los momentos y nunca mas se vuelven a repetir de igual manera. Por mas absurda que parezca la comparación es casi como desearle suerte a alguien antes de jugar un partido de fútbol y desearle suerte antes de despedirse por diez años.
Siempre estabas ahí, conmigo, observando, participando y transformando mis días; los malos en días menos dolorosos y los buenos en excelentes. Pero el señor del reloj con movio sus garras y con todo barrió. Lo que antes era, hoy ya no es, y lo que hoy es, mañana no será, y así cada vida empieza y termina, llena de emociones y acciones y a pesar de todo la mayoría nos vamos "sin pena ni gloria" has algo grande, no importa que, y la humanidad te recordará para siempre...
El cielo azul, la brisa en la piel, aire puro, el sol calentando mi cuerpo. Sobre el horizonte se levanta una ilera de gigantes picos nevados y grandes acantilados. Como desmayado, sobre el pasto siento que todo es muy calmo, muy apacible, muy hermoso para ser real y hay mas. Extiendo mi mano y siento tu cuerpo, giro la cabeza y me encuentro a tu lado, encuentro tu mirada, esa que hace tiempo no veía. Imposible resistirse a ese abrazo, tan cálido, tan cariñoso, tan cedador y el beso como cierre a la escena perfecta, el momento justo para detener el tiempo, dejar de pensar, olvidar todo, dejar la tierra, elevarse sin alas y desear la muerte... es el momento en el cual empecé a temer, y si, como era de esperarse volví a pensar. Otra vez mi cerebro me jugaba en contra, miles de ideas se disparaban unas contra otras, se chocaban y el maldito raciocinio y la mierda que aprendí, la probabilidad y estadística, la maldita inteligencia que me hizo saber que lo mas probable es que nunca este mejor que en ese instante que si seguía vivo sería solo para añorarlo, recordarlo y sufrir por no repetirlo. Todo mi ser se convulsionaba pensando que de ahí en adelante estaba condenado al malestar hasta el último de mis días y que como los grandes debía morir en mi mejor momento, porque ¿de eso se trata no? salir por la puerta grande, convertirse en una leyenda, ser recordado, vive rápido, muere joven y serás un cadáver hermoso, no tenia opción, no había nada mejor que morir ahí, así, sin mas. Una luz me cegó, las oscuridad la sucedió y toda la escena apareció frente a mi mientras me alejaba como flotando, no pude comprender mucho pues estaba algo mareado, miro al suelo y mis pies no lo tocaban, miro al cielo y la luz me encandilo, miro tus ojos y me muestran que ya no hay vida en ellos, bajo la cabeza, miro mis manos y la sangre aun recorría mi piel como ríos rojos recordándome algo que no guarde en mi memoria. Ahora, aquí, donde no hay tiempo, ni pulsos ni latidos, donde el aire no se siente y ya no quema el fuego, no sed, no hambre, no dolor, no placer... daría todo por esos momentos que no quise vivir.
un beso, siempre

martes, 20 de mayo de 2008

Y sigue, y sigue...

Los cambios bruscos disparan miles de emociones, los cambios leves tienen el mismo efecto a largo plazo ¿y que hay cuando nos volvemos a acostumbrar? cuando lo que antes era un cambio ahora es algo normal. Cuando las cosas malas y las cosas buenas pasan a ser normales. Cuando esto sucede dejan de ser lo que eran para convertirse en lo normal y para todos estas cosas habituales no son ni malas ni buenas, son rutina, cosas con las que simplemente vivimos todos los días y cada vez menos nos afecta.
Uno puede saber que el habito de fumar es perjudicial para la salud, pero sin embargo cuanto mas convive con esto menos le afecta saber las consecuencias y así, de a poco, sin darse cuenta uno simplemente lo pone a un costado. Algo así como saberlo pero ignorarlo al mismo tiempo...

Seguro, así pasaría la noche, así pasaría la mañana, así seria, también, la próxima noche y la vida continuaría atada y oscura, perversa y graciosa. Que mejor que reír de la desgracia propia, que de alguna manera, golpea, duele y divierte.
No había expectativa de cambio, todo seguiría igual y un día... llovió, mi vida cambió.
La sangre sobre mi piel se escurría con las gotas y la luz de un rayo dejo ver entre sombras que había mas de lo que creía, que no seria solo esto en mi vida, pero que haría una gran diferencia.
Y el momento de elegir, cortar la cuerda o arrastrarla hasta el fin, tendría suerte de encontrar un pueblo un lugar lo mas pronto posible antes de mis fuerzas agotar o moriría en el intento tirando de la cuerda tratando de llegar, allí donde no hay "ni pulsos, ni latidos" que respondan al entorno, si no que sean consecuencia de sentimientos propios.
Ahora, todo negro. Ahora nada veo, pero siento. Siento muchas cosas, se que están ahí, todavía no se oyen, no se huelen no se tocan y mucho menos se ven. La decisión esta en mis manos, el mundo se aferra a mi. Soy el dueño, omnipotente de mis actos, represor de ideas viejas. Soy yo, no estoy loco, lo aseguro, mis manos son de fuego y volar para mi es un juego. Y aun así estoy indefenso, se que hay algo ahí pero mis sentidos no lo perciben, y que peor que el juego de la memoria que empieza a recordar y nos llena de suposiciones, tal vez sea esto, tal vez sea aquello o tal vez y lo peor de todo, tal vez no haya nada. Y nada, nada es el peor miedo al que me enfrento, nada es nada y esto significa que...
Tu rostro otra vez, tu sonrisa una vez mas, tus sueños, tus promesas, y me llevas a volar. ¿Serás real? ¿será real lo que prometes esta vez? tomo tu mano, dejo que me lleves solo así lo sabré.
Quiero verte cavar, tus mirada aya en la nada, tus manos con sangre, tu cuerpo se enfría, y yo voy contigo.
¿A dónde vamos? - pregunte con la vos de quien es tristemente heroico
ella no respondió, ella no responde, ella no responderá jamás, ella solo sigue, y sigue, y sig...

domingo, 18 de mayo de 2008

(...) Amapola

no soi como bob

ya nada mas puedo pretender acá estoy por ultima vez logre llegar a este punto que para mi es el final no se si lo intente demasiado me costo mucho pero al fin en cuerpo y alma
te tengo eres mía por este noche ayudándome con los asuntos

la has traído?

mi miedosa voz te pregunta.

ato cada nudo como cada cruz en mi vida. a mi lado te encuentras es lo único reconfortante amor por que no me bendices con tu descarada presencia???

esa maldita cuerda tiene mi silueta el mismo rostro las mismas ganas nunca sabré por que lo hice será por el, con su indiferencia será ella, con su carencia hay tantos victimarios AAAAAAAAA siento lastima de mi pero en fin, si estoy acá es por que lo deseo ya esta en mi cuello, no hay nada que se pueda hacer cuando los finales llegan la falsedad se pone a llorar


la ajusto para no arrepentirme doy mis últimos pasos me acerco al limite de mis miedos cada respiro precipitan lo que no es su rostro me incita a ir corriendo y la mano que siempre quise nunca estará alguien desde la esquina oscura alejada de todo, contempla y al ver como me arrojo corre cual estrella a extenderme su fría y antipática mano
no la quiero respondo no quiero ser parte de ti estoy a punto de caer, al mar de tristezas

abro los ojos y me encuentro... en esa esquina oscura, alejada de todo pensando como seria iniciar este camino perderme en todo ser invisible ante sus ojos tal vez con esto
me abra su corazón la luz volverá a mi pero se que nunca será soy insignificante para ely es la ley de lo inalterable

Ana querida, la has traído?

Lamento decir que no soy el culpable de escribir lo arriba escrito y quien lo hizo prefiere no revelarse. A mi me gusto mucho!